Se sabe que la población de alpacas no se encuentra en peligro de extinción pero su distribución es muy reducida. Se le cría principalmente por su pelaje, con el que se fabrican tejidos utilizados en suéteres, ponchos, abrigos, ropa de cama y mucho más.
Es un peligro latente para la alpaca la costumbre de mantenerla en rebaños junto con la llama, ya que ambas especies tienden a aparearse y producir crías con una constitución genética muy débil.
Es un animal exclusivamente herbívoro y su dieta está compuesta de pasto, heno, tallos, cortezas, hojas de árboles y especies de gramíneas como Festuca nardifolia, Agrostis Tolucensis y Deschampsia Caespitosa. Al comer, la alpaca mastica la comida mediante 8 movimientos. Después la traga y pasa por 3 cámaras para continuar con el proceso de digestión.
Necesita demasiado alimento para satisfacer los requerimientos de su cuerpo. Los criadores de alpacas suelen complementar diariamente la dieta de los animales con una dosis de cereales que proveen vitaminas importantes para el crecimiento.
La alpaca es una especie polígama y algunos criadores aseguran que forman harenes compuestos por 5-10 hembras. La hembra alcanza la madurez sexual entre los 12 y los 24 meses de edad, y el macho puede reproducirse a partir del primer año de edad, aunque algunos son maduros sexualmente hasta los 3 años.
Es capaz de reproducirse durante todo el año. En el apareamiento, el macho se posiciona sobre la hembra y ésta permite que el macho introduzca el esperma mientras emite una vocalización conocida como “orgling”. 24 horas después la hembra comienza a ovular y el parto ocurre después de un período de gestación que dura entre 242 y 345 días. Normalmente sólo nace una cría que pesa 8 o 9 kilogramos y que es destetada entre los 6 y 8 meses de edad.
La alpaca es un animal social y vive en grupos familiares. Algunos investigadores sostienen que los grupos están organizados jerárquicamente: se componen de un macho alfa, alpacas hembra y macho y sus crías. Las alpacas son capaces de advertir a sus semejantes sobre algún peligro produciendo una especie de graznido. También suele defenderse escupiendo o pateando a los intrusos.
La alpaca tiene una distribución reducida; está presente en las regiones andinas de América del Sur a una altura de 5,000 metros sobre el nivel del mar. Vive en Perú, Bolivia, Chile, Ecuador y Argentina pero en la actualidad está presente también en países como Estados Unidos, Países Bajos, Australia y Nueva Zelanda como consecuencia de su introducción en la década de 1980. A pesar de esto, el 99 por ciento de las alpacas viven en Sudamérica.
Habita las montañas, sabanas y pastizales del Altiplano andino, cerca de las zonas húmedas y con temperaturas por debajo de los 0 grados centígrados durante las noches.
La alpaca, miembro del orden Artiodactyla y de la familia Camelidae, es distintiva por tratarse de la especie de camélido sudamericano más numerosa y pequeña. Parecida a la llama y al guanaco en su aspecto externo, difiere en peso y tamaño puesto que un ejemplar adulto mide entre 81 y 99 centímetros de altura y su peso oscila entre 48 y 84 kilogramos.
Tiene orejas grandes y puntiagudas. El cuerpo es delgado y sobresale un largo cuello angosto; por supuesto, dicho cuello delgado es perceptible cuando no está cubierto de lana, ya que ésta crece hasta 50 centímetros y posee variedad de coloraciones blancas, marrones y negras. El pelaje puede ser de un color uniforme o multicolor.
Sus dientes caninos están posicionados en ambos maxilares y miden unos 3 centímetros de longitud. La hembra no tiene los caninos tan desarrollados como el macho, pero con excepción de esta característica, ambos sexos son parecidos físicamente.
La Alpaca es un animal que vive en los andes peruanos, a una altura no menor de 4,000 metros sobre el nivel del mar. Por esta razón el pelo de estos animales ofrece características de abrigo, duración, suavidad y ligereza que permite a la alpaca sobrevivir en un hábitat donde el clima es uno de los más rigurosos del planeta. Es justo la capacidad de ofrecer confort la que les brindamos en nuestros productos.
Nuestro alpaca pasa por un exigente sistema de clasificación que permite la obtención en promedio de un pelo de 23 a 25 micrones de grosor y de 60 a 150 milímetros de longitud para así poder obtener un hilado fino, suave y resistente.
Para nuestro teñido se utilizan colorantes ácidos y/o básicos que aseguran el brillo y la solidéz al lavado. Luego se le da un tratamiento para que recupere su suavidad y textura natural